lunes, 22 de agosto de 2011

altas nubes


Porque las nubes están tan altas tiemblas
y tienes el vértigo de  una niña pequeña asomada a la barandilla.
Con un ojo fijado en el suelo y el otro pendiente de un cirro
tiemblas
haciéndote dueña de todos los estrabismos.
¿dónde estarán los aviones –dirás- ,
dónde 
el mágico carro levándome ahora 
para que no me caiga?
Te quedarás inmóvil pensando: 
un ojo en el suelo, el otro en un cirro.

Y envolverás despacio 
la duda como sagaz tanguera
el espanto 
lo cerrarás con fuerza
y las ganas 
desplegarán a oscuras
el miedo
para  después a solas
averiguar que eres la yegua alada

bailando.

1 comentario:

  1. yo he bailado con este poema...gracias, Juana.
    Por cierto, la poesía sonora es fantástica.
    Besos

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LA PANDERETA DIJO (Primera edición)


¿Quién no ha renegado de sus musas o sus musos? (que de todo hay) por bailar la misma música que cotidianamente tocamos? La pandereta dijo es un desafío q todos los instrumentos, entre los que sobresale el ritmo familiar y desacompasado de una historia de amor no solicitada. El libro que tienes en tus manos esconde una realidad donde encuentro y deseo se van transformando en un juego de acróbatas en el que no se sabe cuándo y quién caerá primero.